Cada vez son más los niños y niñas franceses que han descubierto los materiales Body planet. En este primer curso de promoción en el país vecino, ya son un centenar de centros educativos y hogares que han conseguido la magic T-shirt works o las tarjetas Body cards para aprender el cuerpo humano con realidad aumentada.
Algunos de ellos, incluso, se han hecho con los dos materiales, que ya contienen las instrucciones, indicaciones de navegación y todo el contenido anatómico en francés. Para muestra, "Maîtresse Aurel", que ha publicado un blog sobre la realidad aumentada, en el que incluye sus impresiones sobre estos dos productos y fotos de su experiencia en el aula.
Aurélia, que es la autora del blog, es una experimentada maestra que trabaja en CP (Primaria) en un centro de la región de Lorena, al norte de Francia, muy cerca de Luxemburgo. Es una apasionada de su trabajo, ha ejercido puestos de dirección y comparte frecuentemente sus experiencias y reflexiones en el blog.
En ese caso, habla de la realidad aumentada, define en qué consiste, como se aplica al aprendizaje y cita varios materiales que ha probado en su aula. Se detiene especialmente en las aplciaciones de Body planet: "Desde el cerebro hasta los músculos, pasando por el corazón o los riñones, es posible "entrar" en el cuerpo humano para ver cómo funciona", cuenta.
Concretamente, sobre la camiseta mágica (le tee shirt magique), explica que "una vez activada la realidad aumentada, es muy fácil que el niño evolucione "en" el cuerpo de su compañero: es posible hacer zoom para ver mejor los órganos, apuntar hacia ellos para leer el nombre y algunas características, ocultar parte de la imagen para dejar aparecer por ejemplo solo el sistema digestivo o solo el sistema sanguíneo, etcétera".
Sus impresiones son concluyentes: "En mi opinión, la realidad aumentada aporta un verdadero "plus" al aprendizaje. Más allá de la motivación que despierta en ellos, especialmente permite a los estudiantes comprender mejor lecciones y conceptos que a veces pueden ser demasiado difíciles o demasiado abstractos".
Según relata, al usar la aplicación y la camiseta mágica, los alumnos pudieron ver cómo funciona realmente su cuerpo, pero además "hicieron mil y una preguntas ultra precisas que les permitieron descubrir y retener elementos como la vesícula biliar o la aorta, que nunca habíamos abordado antes, pero de la que me hablaron hasta el último día de clase".
Finalmente, insiste en que "el aprendizaje con realidad aumentada cambia completamente la forma en que los estudiantes reciben y retienen la información".
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